Reflexología podal
La Reflexología está basada en la utilización benéfica de los reflejos que producen los masajes. Estos constituyen una respuesta orgánica que tiene lugar en un área alejada, a veces muy distante, de aquella que fue estimulada.
Esto se debe a que esos puntos de los pies constituyen vías o canales nerviosos y energéticos, que conectan a estos puntos de los pies con todas las partes de nuestro cuerpo; por eso, al masajearlos de una manera específica, se estimula el trabajo de glándulas, órganos y músculos.
Los estímulos que realizan los terapeutas son aplicados por medio de los dedos pulgar e índice. El estímulo es conducido a través de canales nerviosos y energéticos alojados en el interior de nuestro organismo que provocan el efecto deseado.
La Reflexología sirve, por tanto, para tratar y prevenir trastornos o enfermedades; pero, también, para suministrar bienestar y relajación.
INDICACIONES PRINCIPALES:
Jaquecas.
Vértigos.
Insomnio.
Ojos cansados.
Hemorragias.
Dolor de espalda y piernas.
Falta de apetito.
Alergias.
Falta de energía.
Estreñimiento.
Dolores reumáticos, contracturas, lumbalgias.
Estrés, depresión, etc...